Cómo abrir una cerradura tubular

En lo que respecta a sistemas de seguridad en el hogar, quizás el primer frente de batalla está en las cerraduras y candados con las que damos traba a los potenciales accesos a nuestra vivienda. Aprende a reconocerlos, para determinar cuál es el más apropiado cierre de traba de tus puertas y ventanas.

Consejos

• Siempre prueba cada una de las llaves, gira en ambas direcciones, antes de recurrir a otras medidas.
• Tómate tu tiempo al elegir un candado sin llave, la paciencia es una virtud.

Cómo abrir una cerradura con un pasador para el cabello

Uno de los métodos que te permitirá abrir la cerradura de la puerta de entrada de tu casa sin llave es con un pasador de cabello. Éste se utilizará a modo de ganzúa para mover los mecanismos del interior de la cerradura y, de este modo, conseguir abrir la puerta.

Lo primero que deberás hacer es doblar el pasador con unos alicates, de manera que consigas una especie de palanca, que es la que hará funciones de llave.

Introduce la parte curva en la parte más baja de la cerradura. Puede resultarte muy útil imaginar cómo es el interior de la cerradura para conseguir accionar el mecanismo.

En términos generales, las cerraduras están formadas por el pomo, que es la cavidad donde introducimos la llave. En el interior del pomo se encuentran las agujas, que son las que mantienen la cerradura cerrada.

La idea es que mediante el pasador desplaces las agujas hacia arriba, de manera que el pomo gire con total libertad y puedas abrir la puerta. Inserta tu gancho por la parte curva en la parte baja de la cerradura. Gira ligeramente la cerradura como si fueras a abrir la puerta, pero sin forzarla.

Con este gesto irás levantando algunas de las agujas y la idea es que al final consigas levantarlas todas.

Puedes ver algunas simulaciones accediendo aquí

Step 2:

Es necesario doblar una pulgada de la parte superior atrás para que toque el resto del paperclip. Esto será el «imperdible de presión».

Tipos de cerraduras según su funcionamiento

Dentro de esta característica de cerraduras expuestas y ocultas, también hay clasificaciones según su método de acción o su funcionamiento, a saber:

Cerraduras cilíndricas. Son cerraduras embutidas en cuyo interior existe un cilindro (bombín de pera o de perfil europeo), que es donde se introduce la llave de apertura. Son un tanto más seguras o menos vulnerables que las cerraduras convencionales, muy adecuadas para las puertas de ingreso.

Cerradura tubular. Es un tipo de cierre que puede trabarse mediante la acción de un botón o manivela, de forma manual. Son apropiadas para habitaciones y cuartos de baño, pues pueden accionarse desde dentro, y también logran destrabarse con sólo girar el picaporte o la manilla.

Cerraduras digitales. Las cerraduras digitales poseen un panel con teclas (números o letras), y presentan un sistema de cierre automatizado que sólo se destraba cuando se ingresa en el panel la clave seleccionada. Las más modernas presentan un funcionamiento similar, pero en lugar de claves se accionan colocando el dedo pulgar, haciendo una lectura de las huellas dactilares. Son apropiadas para bóvedas, cajas de seguridad, cuartos seguros y cavas o estancias en el exterior. Son también las elegidas en hoteles y sitios públicos que requieran de alta seguridad.

Cómo abrir una cerradura con una tarjeta de crédito

Con una tarjeta de crédito flexible o similar puedes abrir algunas cerraduras sencillas. Lo primero que debes hacer es insertar la tarjeta de crédito en el lado de la puerta y deslizarla arriba y abajo entre la puerta y el marco.

Fuente: www.taringa.net

Asegúrate que la posición de la tarjeta es perpendicular a la misma puerta. Empuja lentamente e intenta girar el pomo de la puerta. Piensa que para que la puerta se abra, la tarjeta deberá presionar el pestillo. Intenta apoyarte en la puerta y presionar para que ésta se abra.

Existen otros métodos que te permitirían abrir la cerradura de la puerta, pero nos hemos centrado en estos dos por ser algunos de los más sencillos.

Saber cómo abrir una cerradura puede ser de utilidad en algunas situaciones, pero recuerda que siempre tienes la opción de avisar a un profesional.

Step 3:

Hay que verse igual a la foto. Ahora, pon un ángulo de 90 grados en el siguiente para hacer un «rastrillo». Vete al próximo paso.

Step 5:

El rastrillo se mete primero. Tienes que moverlo hacia atrás y hacia adelante para que apriete unos de los dientes de la cerradura.

Step 6:

el «imperdible de presión» va encima del rastrillo, y tienes que girarlo a la izquierda y a la derecha para averiguar en cuál dirección tenga que girar para abrir la cerradura.