Cómo administrar gotas para oídos a un bebé

Existen varios tipos de gotas para oídos que sirven para tratar síntomas como el exceso de cerumen e infecciones. Las gotas óticas que eliminan el exceso de cera en el conducto auditivo no requieren receta, mientras que las gotas que alivian el dolor causado por infecciones y el dolor causado por natación, pueden requerir prescripción médica.

Consejos

• Si tienes problemas para aplicar las gotas por tu cuenta, pide a alguien más que lo haga por ti mientras te echas de costado.
• Siempre lávate las manos antes de usar el medicamento para el oído en ti o en otras personas.
• Nunca uses las gotas ni irrigues tus oídos sin la aprobación de un doctor si tienes un tímpano perforado. Para la irrigación, usa solo agua a temperatura corporal, pues el agua más caliente o más fría puede causar vértigo temporal.

Te enseñamos cómo dar medicinas a tus hijos, paso a paso

Los papás sabemos de la dificultad que tienen nuestros hijos para tomar algunos medicamentos, ya que no suelen tener buen gusto al paladar. Por ello, deberíamos preguntar al pediatra no sólo sobre la posología y duración del tratamiento, sino también sobre el sabor y forma de administración. Tener en cuenta estos últimos aspectos puede ayudarnos a que dar un medicamento a nuestro hijo no sea «misión imposible».

Cómo aplicar gotas en los ojos a un bebé

Conforme se gana experiencia en poner gotas en los ojos del bebé se hace más fácil y rápido realizarlo y para ello te ofrecemos una guía general sobre cómo se deben aplicar las gotas en los ojos de un bebé

1. Lava tus manos y sécalas bien antes y después de aplicar las gotas para evitar contaminar el medicamento, los ojos del bebé o ser una vía de transmisión si la alteración es por una infección contagiosa.
2. Limpia con una gasa húmeda, de preferencia con suero fisiológico, la zona alrededor del ojo del bebé. Si las gotas se van a aplicar en ambos ojos, utiliza una gasa limpia para cada ojo y para cada vez.
3. Agita un poco el frasco para que el medicamento no quede en el fondo.
4. Quita la tapa del frasco sin tocar la parte que está en contacto con el medicamento, el aplicador, y colócala de costado sobre un área limpia. Asimismo, evita que la punta por donde salen las gotas toque cualquier superficie, incluso la piel o los ojos del bebé, ya que podría contaminarse el medicamento.
5. Pon al niño en una posición adecuada, ya sea acostado boca arriba o sentado con la cabeza inclinada hacia atrás, suele ser más fácil de la primera forma. Si el pequeño es menor de 3 años, y no hay nadie que te ayude a sujetarlo, envuélvelo con una manta o toalla para limitar el movimiento de sus brazos y evitar que en un movimiento brusco se caiga el medicamento o se haga daño el pequeño.
6. Sujeta con una mano la frente del bebé y sube ligeramente el párpado superior del ojo donde se pondrán las gotas. Si el niño insiste en cerrar los ojos, se puede hacer hacía abajo también el párpado inferior.
7. Sostén con los dedos pulgar e índice de la otra mano el frasco, acércalo por encima del ojo sin llegar a tocar el párpado o las pestañas y presiona suavemente el frasco para hacer caer las gotas en el centro del ojo.
8. Suelta suavemente los párpados sin dejar que el bebé mueva la cabeza o se levante por uno o dos minutos. De preferencia el niño debe permanecer con los ojos cerrados, sin presionar fuerte, para que el medicamento actúe mejor.
9. Al mismo tiempo, limpia con una gasa o papel el resto de lágrimas que se encuentren alrededor del ojo.
10. Para finalizar, después de unos pocos minutos, permite que el pequeño abra los ojos y se levante.

Advertencias

• Si accidentalmente usas demasiado medicamento para el oído, llama a un médico para una mayor asistencia.
• Si experimentas enrojecimiento, picazón, dolor o hinchazón en los lóbulos, visita a un doctor lo más pronto posible.

Elimina la cera del oído

Uno de los tipos de gota elimina el exceso de cera en los oídos. La cera, en exceso, se endurece cuando queda atrapada en el conducto auditivo. Afecta al oído poco a poco y puede causar dolor. El ingrediente activo en las gotas para eliminar la cera es el peróxido de carbamida que rompe la acumulación de cera en pedazos pequeños para permitir su fácil extracción. Este tipo de gotas se venden en las farmacias y no requiere receta médica.

La mayoría de las gotas para la extracción de cera se venden en Walgreens, se adquieren dentro de una botella y traen un gotero con goma. El modo de aplicación es el siguiente: acuéstate de lado sobre una superficie, con un oído sobre la almohada. Por ejemplo, si deseas aplicar las gotas en la oreja derecha, acuéstate sobre la oreja izquierda. Deja caer de 5 a 10 gotas dentro de la oreja derecha, asegurándote que la punta del gotero no entre en el canal auditivo. Continúa acostado así, de 4 a 5 minutos más. Coloca una pequeña bola de algodón dentro de la oreja para impedir que las gotas se escurran hacia afuera. Usando el gotero, lava el oído con agua tibia, a continuación, repite el procedimiento con la oreja izquierda. Aplica estas gotas dos veces al día, de 7 a 10 días. No se recomienda dejar las gotas en el oído durante la noche.

Actúa con calma y rapidez

Con un año, quizá los niños no entiendan a la perfección nuestras palabras, pero sí serán receptivos al tono tranquilizador de nuestra voz. Hay que mantener la calma y actuar con movimientos decididos y en un santiamén habremos aplicado las gotas al niño.

Los niños pequeños se molestan muy fácilmente, pero con la misma rapidez recuperan la sonrisa… ¡aprovechémoslo!

Cómo poner gotas en los oídos a un niño

• Primero tumbamos al niño de lado. Tiramos de su oreja ligeramente hacia atrás y echamos el número exacto de gotas aconsejado.
• Intentemos entretener al niño en esa postura hasta que estemos seguros de que las gotas han entrado en el oído.
• Un buen truco para que no se sobresalte al sentir cómo las gotas caen en su oído es calentar antes el frasco frotándolo con nuestras manos. El líquido caliente se nota menos.

Advertencia y reclamación

Las gotas para los oídos están diseñadas para proporcionar un alivio temporal, no curan a largo plazo. Si continúas experimentando un dolor, ya sea por exceso de cera o por una infección, aún después de aplicar las gotas durante más de 7 días, deja de aplicarlas y consulta a tu médico para recibir una tratamiento alternativo. Además, si estás embarazada o amamantando, se recomienda que consultes a tu médico antes de aplicar cualquier tipo de gotas para los oídos.

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